El pensamiento positivo.

Ante una sociedad cada vez mas negativa, solo nos queda la opción de adoptar, «El pensamiento positivo.» ¿Como?.

Cuando estamos martilleando un clavo y el martillo se enfrenta a nuestro dedo acertando de pleno, exclamamos todo tipo de tacos negativos que no hacen mas que agudizar el dolor, claro, tampoco vamos a exclamar, «Uy, que gustito me a dado», pero seguro que aunque contradictorio, el dolor seria menor, ¿Pero por que tenemos esa reacción agresiva?. Se podría decir que el instinto tiene mucho que ver en esto, ante una ofensa, existe una defensa, si alguien lanza su mano ante nuestra cara, nos protegemos la misma para evitar el golpe, esto, tiene mucho que ver sobre el pensamiento negativo y el como actuamos por ello.

Aprender a pensar positivamente.

Adiestrar la mente no es una tarea sencilla, más cuando uno está acostumbrado al «caos psicológico», a ver esa botella medio vacia aunque sepa que en ella hay agua que podría representar el estar también medio llena, es como si una parte de nuestra mente estuviese invadida por el rol malo y la otra por el bueno, pero lo malo es como un virus que se propaga y gana la batalla, en este caso, si la otra parte es la dedil, tenemos que hacer lo mismo que las personas que van al gimnasio, prepararla, fortalecerla, adiestrarla y para ello hay que hacer un ejercicio teórico-práctico.

Ejerciendo la mente, el primer paso.

Vamos a provocarnos un pensamiento negativo, esto a unas personas les costará mas que a otras, pero no es complicado, tan solo tendremos que pensar en la última factura, en la ultima discusión con la pareja, familia o de trabajo, incrustamos ese pensamiento en nuestra mente y pensamos de el modo mas negativo que se pueda, pero el esfuerzo es que ese pensamiento solo ocupe el 90% de nuestra mente, es ese 10% que nos da fe para que lo negativo sea convertido en lo positivo. Un ejemplo:

• Discutimos con la pareja, ella nos echó en cara que olvidamos el aniversario, esta discusión a entrado en nosotros de un modo tan fuerte que no podemos pensar en otra cosa, vemos la pareja casi perdida.

Este, es un ejemplo de «pensamiento negativo», ya tenemos la herramienta, ahora, vamos a contrarrestarla.

• Nos preguntamos, si realmente los años de pareja que tenemos con esa persona, bien vale esta discusión, al fin y al cabo, si son 2 años de relación, es decir, 730 días de nuestras vidas, que en pocos minutos se pueden echar a perder. Lo que tenemos que pensar, mentalizarnos es que NO, que tanto tiempo con esa persona valen más que todo eso, se trata de un descuido, ¿Acaso echo a posta para «fastidiar»?, NO, a sido tan solo un acto involuntario y lo que importa es que el amor entre la pareja tiene que ser mas fuerte que esta situación. Bien, si pensamos en esto, seguramente hemos pasado del 90% al 70%. Pensemos, si la relación merece la pena, VAMOS A LUCHAR POR ELLA y luchar, es dar importancia a las cosas que realmente la tienen, vamos a ignorar radicalmente esas tonterías que van dañando a la pareja, hablar, negociar, entender, ponerse en la piel de la otra persona para que el año siguiente, ese mismo dia sea lo primero que se haga nada mas despertar, felicitar el aniversario con un detalle que haga olvidar el año anterior. Si todo ello lo unimos, ya tendríamos al menos un 50% de pensamiento positivo. Ya para sobrepasar al negativo, vamos a cogerle de la mano y de un modo sincero (la sinceridad a de ser autentica, quien nos conoce va a notar este gesto) pedir perdón mirándole a los ojos. Desde este momento, tomamos el control de nuestra mente y podemos sentirnos aliviados, por que hemos conseguido el PENSAMIENTO POSITIVO. Pero para ello, son las 2 partes las que tienen que participar, de nada sirve hablar con una pared, no te va a responder. Las acciones y reacciones tienen que ser a partes iguales, siempre.

Dominar y no ser dominado.

No me refiero a las personas, no se tienen que dominar a las personas y menos a las que queremos, me refiero a los pensamientos. La mente en ocasiones es como un caballo sin domar, la mente el caballo y nosotros el domador, si permitimos que el caballo tome el control de la situación, no duraremos ni 5 minutos en su lomo, para ello, se requiere de seguridad en uno mismo, no puedes subir al caballo pensando «Me voy a caer», por que te caerás, bien, con todo es igual, si antes de ir a una entrevista de trabajo piensas, «No me van a llamar», ten por seguro que mucha suerte tendrás que tener si te llaman, bueno, suerte o un curriculum impresionante por encima del resto. Con todo ello quiero expresar, que cuando se programa la mente para que algo pase, hay muchas opciones de que suceda de verdad. Esto hace referencia a la cartomancia, aquellos que nos leen la mano, los que aciertan se podría decir que son unos buenos psicólogos, saben ver en nuestro interior el problema y descubren como solucionarlo con palabras, si nos dicen «Vas a tener un accidente», te programan para ello y la preocupación es tal, que solo piensas en eso, con ello, si estás cruzando la calle o vas con tu coche y estás pensando en algo que no debes, tendrás ese accidente. Esto no hará a ese supuesto vidente como un genio, si no a ti como una persona asustadiza desde ese preciso momento en que te lee tu porvenir. Pasado, presente y futuro somos nosotros mismos, nuestra mente para ello tiene mucho que ver, si optamos por un pensamiento positivo, si cada paso que damos en la vida, es para que el segundo sea incluso mas seguro que el primero, no dejaremos que todo esto nos influya. ¿Por qué pensamos que ANTES de ir a una entrevista no nos van a llamar, si desconocemos la situación, la persona que nos entrevista, las que hay antes o después que nosotros?. En la sociedad se instaura el pensamiento negativo ante la mayoría de los actos, uno a uno, tenemos que ir cambiándolos. Relajarse es la clave, calma, se va a la entrevista como un candidato más, no como a esa persona gris a quien no le van a hacer caso. Si no nos llaman, habrán otras puertas que se abran hasta culminar nuestro objetivo.

Ya tengo «pensamiento positivo», ¿Ahora que?

Podemos estar 3/4 de nuestra vida con un pensamiento negativo, cambiarlo por uno positivo y perderlo en escasos días si algo hace que lo cambiemos, por eso recurro de nuevo al ejemplo del gimnasio, la mente no hay que trabajarla en una determinada situación, tiene que educarse y mantenerla siempre y en todos los años de nuestra vida, ese es el objetivo Nº1 que no podemos olvidar.

El equilibrio es la clave.

Un buen ejercicio, es pensar siempre en su opuesto cuando tenemos un pensamiento negativo. Estamos todo el día haciendo la comida, nos descuidamos y se quema, ¡Vaya!, ¿Pero es el fin del mundo?. Hacemos otra cosa aunque no sea tan elaborada, comemos y nos olvidamos del accidente. Podemos lamentarnos días, meses, años…¿Que ganamos con ello?.

La magia de las palabras.

Lo normal en una conversación es construir frases, pero hay que tener en cuenta, que éstas se componen de palabras, palabras como «No puedo», «No se hacerlo», «Es mas listo que yo» tienen que ser contrarrestadas con otras opuestas, con preguntas, «¿Por qué no puedo?», «Si se hacerlo y lo haré», «Si es mas listo, estudiaré para estar al mismo nivel», siempre un camino, tiene una alternativa, si vemos que el primer camino es complicado, optar por otro hasta que estemos preparados para afrontar aquello que al principio veíamos como dificil. Es MUY IMPORTANTE crear metas, pero no es una meta inteligente, si eres capaz de subir una montaña de 100 metros, proponer subir a la primera una de 8000 mil metros, lo mejor es poner metas alcanzables, 100, 200, 300, 500…e ir superándose, esto hará que sea mas facil no abandonar a la primera de cambio. Tengamos en cuenta que una palabra negativa, tiene siempre su opuesta, que algo que se dobla hacia la izquierda, puede ser doblado a su derecha del mismo modo y el mismo esfuerzo.

La seducción de lo negativo.

Lo negativo conlleva a como lo dirían en la tan famosa saga, «El lado oscuro», lo oculto, el morbo, lo prohibido, esto atrae y es contagioso, igual de contagioso el estar con personas con pensamientos negativos, todo es fatalismo y es como una competición de «Quien está peor, quien tiene menos suerte»… es importante por ello, que busquemos compañías similares a nuestro modo de ser por que si de un modo personal hemos logrado cambiar nuestro modo de pensar a uno positivo y quien nos rodea no nos acompaña, será mas fácil caer en ese grupo y todo el trabajo realizado durante el cambio, no servir para nada. A modo de ejemplo, imaginemos una situación.

• Tenemos a 3 personas, una pelota, la tierra, un agujero y el cielo. Las 2 personas tienen la pelota en el suelo, una de ellas quiere hundirla en el agujero, con ello, la pelota va a desaparecer, la otra, la quiere elevar por encima de la tierra, con ello, la pelota se mantiene, nosotros somos la tercera persona y tenemos que elegir a quien ayudar, como ayudar, si queremos hundir la pelota rápidamente o elevarla, suponiendo que 2 personas tienen mas fuerza tanto física como mental ante una sola. Hundirla implica el pensamiento negativo, elevarla el positivo. La elección es solo tuya, pero lo que no puedes hacer es estar indeciso ante una decisión con una situación intermedia y extrema. En esta vida, hay que tomar decisiones y éstas determinarán la clase de persona que somos y pensar, que todo acto tiene una consecuencia.

Dejarnos seducir por lo negativo siempre es el camino fácil, criticar al vecino sin tan siquiera un motivo, solo por deporte,a nuestra pareja de un modo hipócrita, solo nos va a perjudicar a la larga a nosotros mismos, hacer que se hace una cosa cuando hacemos la opuesta y esto trae consecuencias negativas, también nos va a perjudicar solo a nosotros aunque haya «daños colaterales», por lo tanto y aunque sea el camino dificil, lo mejor siempre es no dejarse seducir y hacer que aquello, consideramos lo positivo para nosotros, si nuestra vida gira ante este pensamiento, estoy seguro que lo que venga será positivo.

Si con todo ello habéis logrado cambiar, aunque sea un poco, ya os servirá para seguir cambiando por vuestra propia cuenta y pensar en «PENSAMIENTO POSITIVO» cada vez que tengais un problema y necesiteis una solución.